Mario Lorenzetti es el refuerzo argentino que había confirmado Vikingos para la Liga Boliviana de Básquet hace un par de días y ayer se dio su llegada a la ciudad de Tarija. Pudo entrenar con sus compañeros al mediodía y por la noche.
“Ya estuve en Bolivia, fue hace varios años en Cochabamba para una Dimabol. Veo que ha cambiado y la intención es poder darle mayor competencia al básquet con la Libobasquet”, dijo el base de 1,90 metros.
“La idea con la que vine es hacer lo que hacía en mi país. Tratar de ordenar, hacer jugar al equipo y ponerle carácter en los tramos claves de los compromisos. Es fundamental que en este deporte exista la participación de todos, es decir que vayamos detrás de un mismo objetivo y se genere juego en equipo”, mencionó.
El basquetbolista de 33 años estuvo jugando en el último tiempo en planteles del Torneo Federal de Argentina y llegó con las referencias de ser un buen lanzador que puede jugar de espaldas al aro.
Lorenzetti comentó como se dio su llegada al elenco tarijeño y que se siente cómodo de integrar un equipo que le brinda comodidades.
“Fue Daniel Vaca, presidente de Vikingos, con quien estuve hablando desde hace varias semanas y en la pasada hizo lo imposible para que yo pueda venir. Llegué hace pocas horas y ya estoy a disposición del entrenador, además de haber ya entrenado al mediodía con algunos de mis compañeros”, concluyó.
Además Mario, los otros refuerzos del Club Vikingos, son los ya conocidos Tracy Oneal y Kyle Madison. Estos dos norteamericanos ya defendieron los colores de esa institución en la primera edición de la Liga Boliviana de Básquet y se sumaron hace un par de días a esta segunda travesía del equipo tarijeño.
Con los tres internacionales, más Genaro Vaca e Igor Vargas que se sumaron como refuerzos nacionales, Vikingos está con plantel completo para comenzar a pensar en lo que será La Salle de Cochabamba por la primera fecha.
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