De acuerdo con la convocatoria que rige el desarrollo del certamen nacional que regenta la Federación Boliviana de Básquetbol (FBB), el equipo que pretenda avanzar a la semifinal deberá ganar tres de los cinco encuentros programados. Este hecho pone una presión adicional a los locales quienes están obligados a no dejar escapar puntos si quieren conseguir el boleto a la otra fase del campeonato.
Para el encuentro de esta noche el estratega Giovanny Vargas pretende ampliar su condición de imbatibilidad jugando en casa, donde solo perdió un cotejo. Para ese cometido el entrenador nacional apostará por poner todo su arsenal y con ello dar el primer golpe a su rival en esta segunda ronda de la Liga Boliviana del Básquetbol.
El conjunto calereño lleva cinco fechas sin perder en Potosí, la única derrota que sufrió fue ante CAN el 17 de julio.
La visita no tiene un buen recuerdo jugando en tierras potosinas ya que en la primera fase de la Libobásquet, Peñarol cayó en la quinta fecha ante Pichincha por 112 a 81.
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