domingo, 29 de noviembre de 2015

San Simón barre a sus rivales y es campeón invicto

San Simón logró conquistar por primera vez el título nacional de la Libobasquet tras superar en la tercera final a Vikingos por 109-108 en dramático partido disputado en el coliseo Gróver Suárez de la Costanera.

La garra, entrega, fuerza y decisión permitió que el plantel universitario pueda remontar un marcador adverso.

El apoyo de las tribunas también fortaleció al equipo cochabambino para buscar el aro contrario.

Este triunfo permite romper la hegemonía que tenía Tarija. Ayer Cochabamba levantó el máximo cetro con jugadores jóvenes vallunos y con sentimiento a la camiseta.

El público aprovechó el momento para festejar junto a los jugadores y sacarse algunas fotografías para el recuerdo.

El partido comenzó con un cuarto tarijeño convencido de lograr el triunfo y sorprendió con un triple de Anderson Michael.

San Simón intentó reaccionar, pero los lanzamientos coquetearon en el aro y no ingresaron. El plantel cochabambino estuvo flojo en las marcas dejando el primer cuarto 14-22 a favor de la visita.

En el segundo chico, San Simón intentó reaccionar y logró achicar las diferencias dejando un marcador apretado de 38-39.

Luego del receso, los universitarios jugaron otro partido y remontaron el marcador, con triples de Diego Olguín, Petty y las espectaculares colgadas de Cathey Macklin Jonathan terminando el tercer cuarto 68-64.

La desesperación y el nerviosismo de los visitantes comenzó a jugar en contra y cometieron muchos errores en defensa, dejando crecer al local.

En el último cuarto, fue el más dramático porque punto a punto ambos equipos terminaron igualados 95-95, provocando el alargue de 5 minutos.

El partido fue intenso “no apto para cardíacos” ninguno bajó los brazos y pelearon por el triunfo. Cuando faltaba 2 segundos al partido el equipo visitante hace falta a Olguín y genera tiros libres (107-108).

El quillacolleño se concentra y convierte el primer simple (108-108). En el segundo simple Olguín anotó (109-108) y provocó el estallido del coliseo en un solo grito, San Simón, San Simón.

Al final del partido, los jugadores de Vikingos agredieron a los jueces del encuentro y tuvo que intervenir la Policía para proteger a los jueces que soportaron insultos.

Sanciones

Los jugadores de Vikingos que agredieron a los jueces serán procesados por el Tribunal de la Federación de Baloncesto.


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