Con el triunfo ante los tarijeños el campeón nacional se afianza en la cima del grupo “A” con ocho puntos.
El estratega nacional Giovanny Vargas anticipó que cada partido es una final y así lo encaró ayer el cuadro calereño que desde el primer minuto salió con todo su poderío para hacerse de la victoria.
Basándose en el juego explosivo en ofensiva el campeón nacional se fue al frente del ataque en el primer cuarto. La forma de juego le permitió a Calero sacar una diferencia de 15 puntos al local y dejar el marcador 25 a 10.
Pero las cosas no serían tan fáciles para Calero, porque Vikingos que llegó a este choque con la presión de haber caído en sus cuatro presentaciones buscaba levantar vuelo ante el campeón.
En el segundo cuarto, el cuadro de Vikingos fue más efectivo que la visita, apostando al juego de sus refuerzos extranjeros el quinteto tarijeño presionó en salida.
Esta forma de juego le permitió a Vikingos adueñarse del segundo cuarto por 25 a 19, pero en el global seguía adelante el campeón nacional que dejó el resultado 44 a 35.
En el tercer cuarto el cotejo ganó en emociones por la forma de juego que propusieron ambos quintetos. Vikingos entendió que no está muerto quien pelea y se fue al frente en busca de recortar la diferencia que tenía.
Calero, por su parte, empezó a controlar los tiempos para evitar que el cuadro local alcance su cometido. El tercer cuarto quedó igualado a 21 puntos dejando el global 65 a 56 a favor de los calereños.
Los nueve puntos de diferencia no significaban nada y Calero sabía que su rival podía dar una sorpresa, y con el fin de evitar que ello pase el campeón nacional volvió a apretar el acelerador.
En el último cuarto, los dirigidos por Giovanny Vargas volvieron a mostrar el juego punzante del primer cuarto, esto le permitió poco a poco ir alejándose en el resultado. Al final del cotejo el marcador quedó 94 a 74 a favor de Calero.
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