miércoles, 18 de julio de 2018

Calero sufre un traspié y pierde su invicto en la Libo

El coliseo "Ciudad de Potosí" se convirtió anoche en el escenario de una batalla sin tregua que libraron los quintetos de Calero y CAN, de Oruro, y que al final fue ganado por los orureños que además de los puntos terminaron por acabar con el invicto del campeón nacional.

Al final del cotejo el conjunto de CAN, de Oruro se impuso por 93 a 87 a los calereños y con ello subió al segundo lugar en la tabla de posiciones del grupo “A”.

El conjunto dirigido por Giovanny Vargas terminó pagando caro la relajación del primer plantel que intentó reponerse en los minutos finales, pero la diosa fortuna no estuvo del lado del campeón nacional que vio cómo la victoria se escurrió entre sus manos.

Calero entró como un aluvión al partido, pero ese ímpetu se fue perdiendo con el trascurrir de los minutos.

En el primer cuarto Calero se fue al frente con toda su artillería y ello le permitió ganar por 27 a 20. Este resultado hacia soñar a la hinchada con una nueva victoria dentro de la Libobásquet.

En el segundo cuarto CAN sacó a relucir su garra y mostró que no estaba dispuesto a sufrir una derrota.

El cotejo ganó en emociones por el juego que propusieron ambos quintetos, al final del segundo cuarto la visita ganó 22 a 19, pero en el global el campeón mandaba 46 a 42.

Al verse sorprendido por el juego de su rival Calero volvió al juego asfixiante al que tiene acostumbrado a su hinchada, ello le sirvió para ganar el tercer cuarto por 26 a 25, dejando el global 72 a 67.

Los cinco puntos de diferencia que había al cabo del tercer cuarto no era prenda de garantía, y CAN lo entendió así por lo que se fue con todo en busca de revertir el marcador adverso que tenía.

En el último cuarto la contienda entre ambos quintetos fue una lucha sin cuartel y en el que los técnicos Giovanny Vargas y Sandro Patiño apelaron a su mejor estrategia de combate para ganar.

Mientras los jugadores de CAN, de Oruro, eran efectivos en sus disparos, Calero tuvo la mala fortuna de no acertar ningún tiro a su rival.

El conjunto orureño aprovechó al máximo su juego ofensivo y empezó a alejarse en el marcador hasta que al final ganó por 93 a 87.

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