lunes, 23 de mayo de 2016

Entrevista: Diego García Salort 'No esperaba que me traten como jugador de la NBA'

A sus 23 años tiene su primera experiencia internacional fuera de su natal Uruguay, llegó como refuerzo de la "U" Cruceña a pedido del técnico Mario Beramendi y, hoy por hoy, es el base que mueve los hilos dentro del equipo. Diego García Salort habló con El Día sobre la Liga Boliviana de Básquet (Libobasquet) y fue claro al decir que es un liga en proceso de ser profesional, asimismo, señaló que aún hay clubes que centran su juego solo en los extranjeros. Eligió a algunos jugadores como los hermanos Paolo y Rodrigo Ramos y a Marco Recamo. Está sorprendido por la fanaticada cruceña, porque en cada partido le piden foto, cosa no muy común en la liga de su país. Inculcado por sus padres, su filosofía es exigirse al máximo sea donde sea y sueña con llegar a la selección uruguaya.

P. Esta es tu primera experiencia afuera de tu país, ¿la pensaste dos veces en venir cuando leíste las condiciones?
D.G.: En verdad no sabía todas las condiciones, no sabía con lo que me iba a encontrar. Obviamente no esperaba que me traten como jugador de NBA. Si vos venís a una liga que está en proceso de ser profesional, porque no lo es ya que aún muchos jugadores tienen que trabajar porque no pueden vivir del básquet, entendía que me iba a topar con cosas a las que no estoy acostumbrado. Viendo lo bueno, tenemos un gimnasio para hacer musculación, podemos tener la cancha en la mañana para lanzar, aunque no podemos entrenar en ella, que es en la que jugamos, porque hay partidos. No puede ser que seamos el equipo que representa a Santa Cruz y no podamos entrenar en la cancha que jugamos.

P. Hasta ahora, ¿cómo ha sido tu adaptación a Bolivia?
D.G.: A lo que es el equipo, me han recibido muy bien, me han sorprendido varios jugadores, en ese sentido se ha hecho fácil mi adaptación en cuanto al grupo. En el basquetbol allá (Uruguay) es un poco más de nivel y a veces no es fácil jugar cuando es de menos nivel, porque cuesta. Partido a partido me voy adaptando. Hay cosas que no son comunes, que no estamos acostumbrados, como por ejemplo la cancha que es lo que más rompe los ojos. Nosotros entrenamos intenso. Le metemos dos horas y a los días se siente el dolor en los tobillos, la espalda. Hay que tratar de bancar esas cosas.

P. ¿Has visto algunos jugadores bolivianos que te llamen la atención por su juego?
D.G.: Sí, de mi equipo por ejemplo los hermanos Ramos (Paolo y Rodrigo) me gustan mucho cómo juegan, (Marco) Toño Recamo también. Hay dos juveniles que juegan bien que son el base Salvador Barrancos y (Cristhian) Molina. Veo muchos jugadores con grandes condiciones que lo único que les falta es el entendimiento del juego; no es solo correr y tirar, sino que a medida que vayan agarrando los conceptos pongan en práctica cómo se apoya en defensa, cómo hacer una línea de pase, una rotación, en ataque cómo leer una ventaja te define de una manera el "Pickanroll".

P. ¿Pensás que hay algún jugador boliviano que pueda ir a jugar al extranjero, a Uruguay por ejemplo?
D.G.: Como extranjero es muy difícil. O sea, que lo lleven como extranjero para que sea el desnivelante, pero si fuera uruguayo hay muchos que jugarían sin problema el basquetbol uruguayo, ¿se entiende?. Solo se llevan dos extranjeros por equipos, normalmente un cinco fuerte que tiene que desnivelar y a veces un cuatro o un alero que sea consistente y goleador. Por ejemplo, los hermanos Ramos si fueran uruguayos podrían jugar fácilmente la liga uruguaya.

P. ¿Cómo la ves a la gente?
D.G.: Partido a partido se va llenando más el coliseo. Veo un fanatismo en el sentido de que terminan los partidos y se bajan para pedirnos fotos. Allá (Uruguay) eso no es común. Se valora al jugador. Eso es buenísimo. En Tarija y en Cochabamba he visto que mucha gente asiste a los partidos. Lo que si he percibido es que en Santa Cruz falta más difusión, porque algunas veces uno que otro taxista me pregunta sobre lo que hago, le comento de la Libobasquet y no tienen idea.

P. ¿Qué pensás de la Libobasquet?
D.G.: Los equipos que no tienen mucho plantel en cuanto a nacionales dependen demasiado de sus extranjeros, entonces se torna un poco “anárquico” se podría decir, entregan el balón a sus dos refuerzos que se juegan el uno contra uno. Hay planteles como San Simón y La Salle que juegan más con sistemas y hay otros que solo tienen la pelota y la lanzan. Falta la organización de la liga, creo que haciendo un buen proyecto, una buena estructura, el basquetbol de Bolivia puede ir creciendo. Es más, por lo que me han dicho viene creciendo año a año. Como que hay material para hacerlo.

P. ¿Cuál sería tu tope como jugador?¿A dónde querés llegar?
D.G.: No me planteo, quiero llegar a la NBA, eso es lo que la mayoría aspira. Quiero llegar a la selección uruguaya sin dudas. No tengo fecha para eso, trato de dar lo máximo día a día, para que a la hora que me toque dejar el básquet no me arrepienta de nada de lo que hice. Miré una película que decía que si piensas en hacer un muro, trata de poner una piedrita día a día.

El Perfil

Diego garcía salort
Basquetbolista

Ciudad natal:
Montevideo

Cumpleaños:
22 de junio

Familia:
José Luis (papá+) e Isabel (mamá). Andrea (29), Gabriel (27) y Federico (26), sus hermanos

Clubes:
Aguada y Defensor Sporting (Uruguay)

Selección:
U-12, U-14, U-16 y U-18.

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