RENÉ CALVO
"Todo el sacrificio tiene su recompensa, el primer objetivo era llegar a una selección boliviana y lo he conseguido, ahora hay que seguir trabajando para llegar más lejos”.
Proveniente de una familia de deportistas, el chuquisaqueño René Calvo busca ser el primero en hacer del deporte una profesión. A sus 23 años, el joven talento capitalino fue tentado por un club peruano para jugar la Liga de ese país.
Criado en las canchas, con el abuelo, los padres, los tíos y los primos practicando deporte, René ha ido madurando y tiene la oportunidad de marcar la diferencia en una disciplina que pretende ser competitiva a nivel internacional y ser un estilo de vida para los basquetbolistas bolivianos.
Luego de haber practicado de manera amateur el voleibol y el voleibol de playa, Calvo pretende profesionalizarse en el básquetbol, un deporte semi profesional en Bolivia y que ya le dio sus primeros frutos.
Desde su abuelo, Rafael, el principal precursor para que la familia Calvo incursione en el deporte chuquisaqueño (básquetbol, voleibol y voleibol de playa), ninguno pudo convertir al deporte en una profesión, una meta que René apunta a lograr.
El fruto de sus años jugando básquetbol semi profesional, en la Liga Boliviana de Básquetbol, llevó a René a coronarse subcampeón vistiendo las camisetas de Amistad (2014) y Pichincha (2016), y ser convocado a la Selección Boliviana, con la que asistió a un Campeonato Sudamericano.
Estos logros fueron suficientes para que el Club Arequipa, del vecino país incaico, se fijara en las virtudes del chuquisaqueño y lo fiche para reforzar su plantilla y disputar la Liga Peruana de Básquetbol, en septiembre próximo.
Un primer paso para que René alcance su sueño de profesionalizarse jugando el deporte de la canasta, algo todavía inédito en Bolivia.
“Esto se debe a un trabajo bastante duro que venimos realizando”, comenta René días después de haberse coronado subcampeón con Pichincha y de enterarse del interés del club peruano por ficharlo.
Sin embargo, consciente de que este es sólo un primer paso de una largo camino por recorrer, René se muestra tranquilo y con los objetivos bastante claros. “Todo el sacrificio tiene su recompensa, el primer objetivo era llegar a una selección boliviana y lo he conseguido, ahora hay que seguir trabajando”, señala.
Con una familia metida de lleno en el deporte, ¿fue fácil vivir al ritmo de ellos?
Me han inculcado desde pequeño ir por el camino del deporte y mi vida es el deporte. Mi abuelo es el que ha hecho posible de que toda mi familia practique deporte y creo que a todas las generaciones que vengan les vamos a seguir inculcando esto.
¿Cómo son las reuniones de una familia deportista?
En todo almuerzo y reunión familiar era hablar del deporte, de prepararnos para el campeonato que se nos venía y de sacrificarnos.
La familia Calvo se ha caracterizado por practicar básquetbol, voleibol y voleibol de playa, deportes que también jugaste en una determinada etapa, pero ¿qué te inclinó a dedicarte exclusivamente al básquetbol?
El básquetbol se ha vuelto semi profesional, en los otros deportes sólo inviertes dinero y no recuperas nada, es amor al deporte, eso me ha motivado a ir por el básquetbol.
En lo personal, ¿es el deporte que más te gusta?
Ahora que estoy constantemente en el básquetbol, es de mi vida cotidiana, pero también estoy empezando en motocross y tampoco dejé los otros deportes por si debo asistir a torneos nacionales representando a Chuquisaca.
Luego de haber jugado toda tu vida en Sucre, ¿qué te impulsó a ir a Potosí, fichar para Pichincha y cambiar de aire?
Quería mejorar y vi que Pichincha estaba formando un buen equipo, sabía que se podía “campeonar”, contrataron un entrenador bastante bueno y en lo económico, necesitaba para los gastos del básquetbol. Es la segunda oportunidad que pude salir subcampeón, pero voy a seguir trabajando porque mi objetivo es ser campeón.
¿Fue difícil adaptarte a jugar en otra ciudad, con otro clima y con un nuevo equipo?
Este año ha sido bastante duro, he vivido la mayor parte en Potosí, entrenaba en tres turnos, con dieta, fue algo sacrificado; pero si quieres llegar a un nivel de competencia tienes que sacrificarte y luchar por lo que te gusta, por eso trabajé día a día para poder mejorar.
El hecho de que otro de tus compañeros que jugaba en Amistad, Carlos Romero, se haya ido junto contigo ¿ayudó a que te aclimates rápido?
Con Carlos (Romero) tengo bastante tiempo jugando, ha ayudado a que esto salga adelante porque nos entendíamos bastante bien.
¿La oferta de jugar en Perú es viable, podrás ir?
Es algo duro, pero hay que ser realistas, de esto se vive y mientras me den las oportunidades voy a poder lograrlo; voy a entrenar para subir mi nivel y salir a jugar afuera.
¿Crees que este es el primer paso para lograr profesionalizarte?
La Liga Boliviana es la intención de la Federación y de los jugadores de ganar algo de sueldo y seguir en este deporte que es caro. Dios quiera que continúe la Liga y vaya mejorando para el bien de los deportistas y del básquetbol.
Creo que ahora vamos a ir con la Selección a jugar varios partidos afuera para tener una mejor preparación al pre mundial y tengo que sacar el máximo provecho a todo esto.
FICHA PERSONAL
Nombres: René Antonio
Apellidos: Calvo Vidales
Fecha de nacimiento: 19 de mayo de 1993
Edad: 23 años
Ocupación: Estudiante de Mecánica Automotriz
Padres: Juan Calvo y Giovanna Vidales
Hermano: Sebastián
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