La derrota caló hondo en la parcialidad de la vieja casona que increpó al técnico Diego D’ Andrea por el bajo rendimiento del equipo.
En los primeros minutos del primer cuarto, Pichincha comenzó entumecido, pero logró dar la vuelta el marcador y en los últimos cinco minutos supo sacar adelante el cotejo y se impuso por 25 a 16.
En el segundo cuarto, los yerros en salida fueron mucho más evidentes. Esta situación fue aprovechada por La Salle que con la conducción del excalereño, Martín Ochoa, empezó a relucir su juego letal en ataque.
El segundo cuarto favoreció a la visita que ganó 29 a 12, dejando el global 45 a 37.
El quinteto tarijeño sabía que no podía bajar los brazos y permitir la reacción del subcampeón nacional, por ello en el tercer cuarto siguió con la misma presión para ampliar la diferencia en el marcador.
Con los lanzamientos de tres y los contragolpes el cuadro de La Salle, ganó el tercer cuarto por 30 a 10, dejando el global 75 a 47.
Los 28 puntos de diferencia le dieron la tranquilidad necesaria a los tarijeños para afrontar el último cuarto del cotejo de la serie “B”.
Herido en su amor propio y por la presión del público, el quinteto de la vieja casona se fue con todo en procura de revertir el resultado adverso que tenía. El cuadro local empezó a presionar en salida a los tarijeños, pero esto no fue suficiente porque La Salle controló el balón y al final del cotejo el marcador favoreció a La Salle por 87 a 69.
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