La Federación Boliviana de Baloncesto (FBB) aspira a lograr un 2018 en el que la Liga Boliviana de Básquetbol (Libobasquet) tenga una estructura que cuente con clubes y socios; además de maximizar el apoyo de las empresas estatales y privadas.
Equipos con personería jurídica y socios inscritos es el objetivo de la entidad comandada por Marco Arze, que aclaró, en las últimas horas, que otra de sus metas es que todos los clubes tengan las mismas herramientas en el seno federativo y no existan disparidades entre ellos.
En ese sentido, los refuerzos internacionales del club Calero llegan a cobrar 2.000 dólares, mientras que los nacionales perciben poco más de 1.000.
Así, el conjunto potosino, que es finalista del torneo liguero, es uno de los mejores pagados, lo que responde a una “visión empresarial” consolidada que apuesta por el juego colectivo a lo grande.
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