El club paceño Bolivia Mar (Bol-Mar) entró en la recta final de su preparación para afrontar la Liga Boliviana de Básquetbol (Libobásquet), que se iniciará el viernes, con la participación de diez equipos de todo el país, y su meta es el título.
La Libobásquet fue creada por la Federación Boliviana de Básquetbol (FBB) con la premisa de dar el primer paso para profesionalizar esta disciplina, ya que en 2017 se desarrollarán las eliminatorias sudamericanas de este deporte para el Mundial, además, se prevé que para 2018 cuente con un equipo nacional que juegue en los XI juegos Sudamericanos, en Cochabamba.
Bol-Mar, equipo que está bajo la dirección técnica de José Luis Revollo, se prepara desde hace un mes para este campeonato con jugadores que son amateurs, pues éstos no se dedican a tiempo completo al baloncesto, solo por horas.
El club, al igual que sus rivales, contrató a tres refuerzos extranjeros, ya que es un requisito para todos los equipos participantes. Los de Bol-Mar son de Estados Unidos.
Se trata de Justin Hamilton, Leonard Lewis y Nate Young, los tres con un promedio de edad de 27 años.
“Por las características que estamos viendo (de los norteamericanos) en estos días, creemos que se van a acoplar bien al equipo”, dice Revollo, quien ya lleva con los extranjeros una semana.
Los basquetbolistas de afuera se suman a otros 14 jugadores del país para conformar un plantel de 17: Christian García, Arturo Beckwith, Daniel Mercado, Wálter Góngora, Suhel Khan, Marcelo Revollo, Shahid Khan, Octavio Orsag, Wálter Ramírez, Vladimir Segales, Brayan Gironda, Mauricio Fernández, Fabricio Núñez y Rodrigo Fernández.
El paceño forma parte del Grupo A junto con CAN (Club Atlético Nacional, de Oruro), Vikingos (Tarija), Universidad Mayor de San Simón (Cochabamba) y Peñarol (Quillacollo).
El sábado debutará ante Peñarol en el valle desde las 21.00, en el coliseo Max Fernández.
En la Serie B están Amistad (Sucre), Pichincha (Potosí), La Salle (Tarija), Universidad Católica Boliviana (UCB, de Cochabamba) y Universidad René Moreno (Santa Cruz).
Refuerzos extranjeros quieren ‘ganar todo’
Marceloa Avendaño Los estadounidenses Justin Hamilton, Leonard Lewis y Nate Young llegaron a Bolivia con la intención de “ganar todo” y esperan que el club salga campeón de la Libobásquet (Liga Boliviana de Básquetbol).
“Vine solo a ganar, no espero nada menos, es lo único que quiero”, manifestó Hamilton, quien tiene una estatura de 1,85 metros y ocupa la posición de base.
Lewis, quien es alero y mide 1,92 metros, manifestó sentirse a gusto en Bolivia y que es su “primera vez” en el país, por lo que desea tener “un buen recuerdo de esta nueva experiencia”.
“Mi expectativa es ganarlo todo, para eso he venido, si seguimos trabajando duro como lo estamos haciendo lo vamos a hacer”, indicó Young, el más alto de los tres norteamericanos, pues mide 2,04 metros y es ala-pívot.
Estos jugadores —según indicó el técnico José Luis Revollo— tienen contrato con el club por tres meses —tiempo que durará la competición— y hay la posibilidad de ampliar su vinculación si se dan buenos resultados.
“Los tres tienen una capacidad física importante, son rápidos y corren mucho, eso nos ayudará en el torneo”, dijo Fabricio Núñez, uno de los jugadores del equipo y también uno de los auspiciadores del club, pues con la colaboración de su empresa, Jacha Inti, que se encarga de comercializar la quinua, ayudó a traer a los tres norteamericanos.
El club invierte unos 25.000 dólares
Marceloa Avendaño Unos 25.000 dólares es la cantidad que está invirtiendo el club Bol-Mar para su participación en la Libobásquet, señaló el entrenador José Luis Revollo (foto).
“Viajaremos cinco veces al interior (del país), más hospedaje, alimentación; a eso hay que sumar los sueldos de los tres refuerzos, son los únicos que cobran en cuanto a una mensualidad”, explicó el técnico, quien espera que todo el esfuerzo de su equipo y de los demás clubes participantes dé sus frutos durante la competición nacional.
Los viajes al interior del país, en un lapso de tres meses, tiempo que durará el campeonato, son lo que más encarece la inversión que se hace.
“Es la primera vez que los clubes tienen que invertir tanto, la primera vez que hay una liga nacional de básquet, los presupuestos van entre 20.000 dólares y 25.000 dólares por equipo, entre viajes, jugadores; realmente se acumula, pero esto va a valer la pena si la gente va al coliseo a apoyarnos”, comentó Fabricio Núñez, uno de los jugadores del plantel y también auspiciador.
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